El pasado viernes 8 de junio se celebraron las pruebas libres para la obtención del Título de Educación Secundaria en la Comunidad Valenciana, en las que estaban matriculadas un total de 8.683 personas, lo que supone un 51,7 % más de participación que el pasado año, cuando se matricularon 5.723 aspirantes.
Por provincias, la convocatoria más multitudinaria fue la de Valencia, con 4.861 aspirantes, distribuidos en 55 tribunales, seguida de Alicante con 2.722 aspirantes y 30 tribunales y finalmente Castellón, con 1.100 matriculados y 16 tribunales.
Estas pruebas fueron instauradas en la comunidad en el año 2000, y con ellas, según dijo la consellera de Educación, formación y Empleo, María José Català, “la Administración educativa pretende que las personas mayores de 18 años que acabaron las enseñanzas secundarias sin lograr los objetivos de esta etapa educativa puedan finalmente alcanzar la titulación y tener una mejor inserción laboral
Desde su puesta en marcha, estás pruebas han visto como tanto el número de aspirantes, como el número de personas que consigue el título ha ido cada año en aumento, pasando de 291 persona matriculadas en la primera convocatoria del año 2000, a las más de 8600 en la convocatoria de junio de 2012, lo que supone que el número de aspirantes se ha multiplicado por 30, número que sin duda se incrementarán en la segunda convocatoria prevista para este año, cuyo examen se celebrará en octubre.
En los 12 años de vida de estos exámenes se han presentado un total de 49.519 personas, de lascuales han aprobado 6,384, aproximadamente el 12,8% del total, lo que convierte a la Comunidad Valenciana en una de las regiones españolas con mayor porcentaje de aprobados.
Sin embargo, podemos considerar que el número de personas que consiguen aprobar es relativamente bajo, no únicamente en valencia, también en toda España, lo que puede deberse a que las personas que se presentan a las pruebas no poseen el nivel de preparación adecuado. De todos modos el interés de las tanto de administraciones, como por la ciudadanía en este tipo de pruebas demuestra un interés por potenciar la formación de los adultos, lo que supondrá tener una población preparada de cara al futuro.